Clima psicológico profesor-alumno

A los profesores que LES GUSTA LO QUE HACEN, son mas generosos en sus evaluaciones, se muestran más tolerantes y amigos, oyen a los alumno y estimulan la participación; y logran mejores resultados que los profesores competentes en su materia pero más fríos y distantes en relación a la clase.

Cuanto más jóvenes sean los alumnos, más importantes será la relación afectiva. Una sonrisa, un abrazo, una palabra amiga, frecuentemente tienen efectos más positivos sobre el aprendizaje que múltiples consejos y órdenes.

En lugar de castigar el comportamiento negativo, estimular e incentivar el comportamiento constructivo.

En lugar de forzar al niño, orientarlo en la ejecución de las actividades escolares oyendo sus opiniones.

Evitar la formación de prejuicios, por medio de la observación y el diálogo constantes que permitan al profesor constatar los cambios que están ocurriendo con el alumno y comprender su desarrollo.

Sin duda lo que más perjudica el clima psicológico en la escuela es el sistema social en que vive. Generalmente la escuela no tiene en consideración la situación familiar de cada alumno (el tipo de familia, el número de hermanos y la educación familiar) puede muchas veces dificultar el clima que surge en el aula.

 

Si el profesor logra comprender los problemas psicológicos y orgánicos de cada uno de sus alumnos entonces el alumno podrá vencer estas dificultades para que no afecten el clima psicológico del colegio.

El profesor debe de ser paciente, dedicado, con voluntad de ayudar y tener una actitud democrática para que el ambiente en la escuela sea positivo.