El Secreto de las siete semillas de David Fishman

¿Eres Feliz? Es la pregunta clave, la base de toda esta historia. La felicidad es lo que el hombre desea pero que muchas veces no es capaz de tener por muchas razones, talvez por que pensamos mucho o porque todo lo complicamos.

Es una novela escrita por David Fishman. En ella narra la historia de un hombre llamado Ignacio Rodríguez que es gerente de R y G, un negocio familiar que hereda de su padre y que asume la responsabilidad de mantener el liderazgo de la empresa. Para esto trabaja 18 horas al día, descuida a su familia y no se alimenta bien ni  hace ejercicio, esto lo lleva al hospital por una angina de pecho. Busca ayuda en un guía espiritual que le da enseñanzas con siete semillas. ¿Por qué las enseñanzas son como semillas? Porque el aprendizaje de los mensajes para mejorar la vida debe ser lento y sin apresuramientos como el crecimiento de las plantas para que se adhiera y se interiorice en nuestra personalidad llegando a formar parte de nuestras vidas.

Es un libro lleno de mensajes de sabiduría como el autoconocimiento de nuestras propias reacciones debido a emociones que traemos en el alma  a consecuencia de los maltratos tal vez sin intención que recibimos de nuestros seres queridos cuando éramos niños. Nuestros padres o cuidadores  también recibieron lo suyo cuando eran niños es por eso que repiten las mismas conductas hacia nosotros y esa cadena de acontecimientos vienen de generaciones atrás, y nuestras reacciones no las podemos ver por nosotros mismos pues somos como un ciego andando en un cuarto con cosas calientes y solo al sentir estas cosas calientes podemos darnos cuenta de nuestras propias reacciones y actitudes. Como por ejemplo si nos criticaban cuando éramos niños por algún error cometido entonces cuando tenemos alguna situación complicada o difícil nos sentiremos tontos o inútiles pues ese es el sentimiento que nos hicieron sentir cuando niños. Y debemos conocer estas reacciones para afrontarlas y reconocer nuestras emociones para poder combatirlas y mejorar nuestro desempeño. Esta es la primera semilla que es la semilla golpeada. Hacernos conscientes de nuestras propias emociones nos ayudará a mejorar.
La segunda semilla es la mimosa púdica que es una planta que cuando siente ruidos se esconde retrayendo sus hojas. Debemos de autoconocernos y ser conscientes de los leños(traumas) que llevamos desde niños, pues estos leños en cualquier momento pueden arder y resultar en comportamientos negativos. Para que esto no suceda es necesario humedecer estos leños y esto se logra con la meditación, que es dejar de pensar para encontrarnos con nuestros yo interior divino y al estar en contacto con nuestra divinidad obtenemos paz, amor y por lo tanto la verdadera felicidad.  

La tercera semilla es la semilla del rosal que es la del ego. Podemos ver la hermosura de la rosa de lejos pero al acercarnos nos hiere con sus espinas(su egoísmo). Las personas con ego son las que buscan admiración, prestigio pero lo hacen por su baja autoestima porque se sienten inferiores, poco valoradas o inseguras, el ego lo podemos aprender a domar con la meditación poco a poco.

La cuarta semilla es la semilla de la planta de mango. Esto significa el servicio desinteresado. La felicidad más grande en el mundo es ayudar a terceras personas. Es como si Dios te diera un premio por alinear tus acciones con la divinidad. Para hacer servicio debemos empezar con nuestra propia persona, luego con la familia, los amigos, los vecinos etc.
Todos tenemos una misión y el servicio que hagamos debe estar alineado con nuestra misión. También tenemos una lección que aprender de acuerdo a nuestro nivel de desarrollo espiritual y esta lección  la identificamos en nuestras dificultades, retos, pruebas y problemas. Algunas de estos problemas son lecciones aprendidas, otras dificultades nos han marcado hacia conductas destructivas y negativas y estas son las que debemos revertir.

La quinta semilla es la semilla de girasol que rota durante el día buscando al sol. Se trata sobre tomar todas nuestras decisiones de acuerdo a nuestros valores.
El girasol nos recuerda que no interesa a qué circunstancias o problemas nos enfrentemos en la vida, o en que momento del día nos encontramos, siempre debemos orientar nuestras decisiones hacia la luz, hacia Dios.
No habría piratería de libros si no hubiera quien los compre y no habría corrupción si no hubiera quien ofrece coimas. Pensar en los peores resultados si tomamos una decisión deshonesta nos hará vivir una vida tranquila y en paz.

La sexta semilla es la semilla del árbol de pino que significa tener un perfecto equilibrio en la vida. Nosotros como el pino también tenemos ramas es decir diferentes papeles que jugamos en nuestra vida. El secreto es que debes de saber equilibrar cada rama o papel que jugamos en nuestra vida logrando el balance perfecto, hacer que un papel no le de sombra a otro, tal como lo logran las ramas del pino: todas reciben por igual la energía del sol. Aprender a delegar es muy importante para dedicarle tiempo a lo realmente importante. Esto significa planificar nuestra semana para dedicarle tiempo a lo que nos ayuda a lograr nuestra misión en la vida y así no hacer que el tiempo se nos evapore de las manos. La sexta semilla nos permite tomar el control de nuestra vida y dirigirla hacia las cosas más relevantes para así definir y fijar nuestras prioridades.

La séptima semilla es la semilla del árbol del hunco, este árbol tiene la capacidad de ser totalmente flexible. Tiene la capacidad de de soportar vientos huracanados y hasta de doblarse y colocarse en posición horizontal. Su flexibilidad le da libertad total de movimiento. Nos dice que en la vida debemos de tener la libertad de adaptarnos a los cambios. Lo único que es rígido y no se mueve es su raíz, es decir que lo que no debemos cambiar es nuestra alma y sus valores. El otro mensaje de esta semilla es la sabiduría del desapego. En la superficie, el hunco no está apegado a nada, fluye con los vientos y no les ofrece resistencia como otros árboles rígidos. Los seres humanos debemos ser como el hunco libres sin ataduras materiales. Estar desapegado no significa que las cosas no te interesan, significa aprender a ver el verdadero significado de las cosas.
                                                                                                                               
Frases que me gustaron:
"Hemos venido a aprender y crecer como espíritus en el viaje"

"Hemos venido para recordar que nuestra verdadera esencia es de paz y tranquilidad"

"Cuando dejes tu cuerpo y mueras en este plano, no te llevarás tus metas, tus logros, tus bienes materiales o tu empresa. Lo único que te llevarás será tu espíritu"

"La empresa es este mar movido, lleno de olas de cambios, crisis y problemas. Allí tienes la oportunidad de oro de aprender y desarrollar tu espíritu"

"Si todos entendiéramos que somos una sola conciencia cósmica nos ayudaríamos más entre nosotros"

"Este es el reto del ser humano: tener el valor de crear nuevos caminos y dejar las rutas conocidas, para mejorar y crecer"




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